Monsieur Sandoz

Monsieur Sandoz

lunes, 9 de noviembre de 2009

Se me antoja un licuado.

te abrí el corazón y saqué a bailar a tus demonios.

Te he visto caer tantas veces, casi siempre mordiendo la lona con la boca pintada de rojo, y las rodillas cobardes para levantarse una vez más.
Hay tanto rouge en esta alma, tanta máscara usada. Hace tiempo un soplo nos ponía en carrera de nuevo, ahora ya estamos viejos para esos trucos fáciles.
Las cosas cambian, y vos también, ya no crees en palomas y cada vez son menos los hermanos por los que morís, cuanta verdad sin sentido. Cuanto rasgar para encontrar siempre otra piel, la sangre esta cada vez mas abajo y no es tan roja(como solía temer).
Un micro anónimo siempre era la primera opción, volar lejos, dejando el tendal de muertitos llorando en el andén, en esa época las cosas eran así de simples:el ritual de la tele encendida,nos atábamos los cordones y la luna que se iba sola.
En estas piernas ahora callás los ruidos de antes, te remachas a la espalda de tu mejor locura, rogándole a un viejo Dios que no corra nunca.
Te encontró perdida, y los dos sabemos que los tontos nunca perdemos la suerte:Salud para tus fichas y tu sonrisa reciclable,mi cielo termina acá.

No hay comentarios:

Publicar un comentario